.
No creas
No, no creas que te dejé de amar,
no creas que no había nada en mí y partí;
entre las olas mar adentro fui
pues el agua se deja bien surcar;
mi alma inquieta se aburre en tu negar,
debe amar, no creas que me morí,
como tu “no por no” ahoga lo que di
debe ir a hablar, su instinto suspirar;
yo, débil, puedo estar aquí rogando
mas mi honda alma en su efluvio está volando,
no crea hundir tu pesar a mi candor,
él vive, tú marchita eres desdicha,
¡del no no negaré al Éter amor!,
no creas que porque no amas no hay tal dicha.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario